El Protocolo de Montreal o, por su nombre largo, el Protocolo de Montreal relativo a las sustancias que agotan la capa de ozono, operforación de la capa de la zona Es un acuerdo internacional diseñado para detener la producción de muchas sustancias que causan
Fue acordado en Montreal en 1987 y entró en vigor en 1989. Desde entonces, se han realizado nueve adiciones al acuerdo. Se llevaron a cabo en Londres en 1990, Nairobi en 1991, Copenhague en 1992, Bangkok en 1993, Viena en 1995, Montreal en 1997, Australia en 1998, se realizaron adiciones en Beijing en 1999 y, más recientemente, en Kigali en 2016.
La anexión de Kigali ha sido aceptada pero aún no ha entrado en vigor en noviembre de 2016. El Protocolo de Montreal se firmó bajo el Convenio de Viena para la Protección de la Capa de Ozono, que fue ratificado en 1985 y entró en vigor en 1988 y sirvió como convenio marco para el Protocolo. Los objetivos del Convenio eran fomentar la cooperación mediante la investigación y el intercambio de información y observaciones sistemáticas sobre los efectos de las actividades humanas en la capa de ozono, y adoptar medidas legislativas o administrativas contra las actividades que pudieran afectar negativamente a la capa de ozono. La Convención de Viena no requería que los países tomaran medidas concretas para controlar las sustancias que agotan la capa de ozono. Por lo tanto, de conformidad con las disposiciones de la Convención, los países del mundo han aceptado el Protocolo de Montreal. La Convención de Viena y el Protocolo de Montreal fueron los primeros tratados universalmente ratificados en la historia de las Naciones Unidas, con 197 ratificaciones de 196 estados y la Unión Europea. Por lo tanto, el protocolo se considera un ejemplo sobresaliente de cooperación internacional debido a su amplia adopción e implementación.
Según el informe publicado por el PNUMA en 2014, se afirma que, como resultado del protocolo, se espera que la capa de ozono en la Antártida, donde el agujero de ozono se recupera gradualmente, vuelva a los niveles de 1980 entre 2050 y 2070. Está estructurado alrededor de varios grupos de hidrocarburos llamados Estos son los clorofluorocarbonos (CFC) y los hidroclorofluorocarbonos (HCFC). Estas sustancias se utilizaron ampliamente en electrodomésticos como refrigeradores, acondicionadores de aire, extintores de incendios y en industrias como la aviación, la agricultura y la electrónica. En lugar de estos gases se han utilizado hidrofluorocarbonos (HFC), que no contienen cloro.
Sin embargo, aunque los HFC no dañan la capa de ozono, ya que no contienen cloro, los altos